El socialismo ratificó su perfil opositor

El PS echó a Basteiro y a González

Son aliados del Gobierno y los acusan de haber promovido incidentes en un congreso partidario

Jaime Rosemberg

Luego de cinco meses de debate y por orden del titular partidario, Rubén Giustiniani, los socialistas cercanos al Gobierno Oscar González y Ariel Basteiro se quedaron oficialmente ayer sin partido.

El Comité de Etica del Partido Socialista (PS) decidió ayer por la tarde expulsar de sus filas a González, actual vicejefe de Gabinete, y Basteiro, diputado del bloque oficialista Encuentro Popular y ex delegado del Gobierno en el directorio de Aerolíneas Argentinas. Fue el último capítulo -por ahora, al menos- de una decisión anunciada.

Con la venia del gobernador de Santa Fe, Hermes Binner, Giustiniani decidió dejar a los dirigentes aliados al kirchnerismo fuera del partido por los violentos incidentes registrados en Costa Salguero en septiembre último, que obligaron a suspender el congreso partidario.

El Comité de Etica, integrado por tres dirigentes leales a Giustiniani -defensor del perfil opositor del PS-, concluyó que los "socialistas K" tuvieron que ver con la organización y realización de los incidentes, que en los hechos sólo postergaron la decisión partidaria de afianzar el acercamiento a la Coalición Cívica y la UCR.

Para el Comité de Etica, González y Basteiro con culpables "tanto por la gravedad de los hechos de los que se los responsabiliza como por el daño que la trascendencia pública de los mismos le ocasionó al partido". A González también le achacan haber aceptado sumarse al Gobierno sin consultar a la conducción partidaria.

Contrapunto

La jefa del bloque de diputados nacionales del PS, Silvia Ausburguer (Santa Fe), afirmó a LA NACION: "Quedó claro que ambos estuvieron al frente y alentaron los hechos de violencia para que el congreso no se realizara". Para la diputada, "Basteiro y González están muy lejos del ideario socialista y detrás de ellos no hay respaldo". El Comité de Etica decidió aplazar una decisión sobre la situación partidaria de Jorge Rivas, que se repone de una brutal agresión sufrida mientras ocupaba el puesto de González junto con el entonces jefe de Gabinete, Alberto Fernández.

Basteiro, en tanto, afirmó que "se trata de una medida administrativa, sin validez legal" por parte de "émulos de Torquemada que intervinieron aviesamente el distrito bonaerense con el único fin de eliminar a quienes piensan distinto". Para González, "intentan apoderarse de una sigla histórica con el propósito de usufructuarla en beneficio propio", y reclamó a Binner y a otros históricos del partido como Héctor Polino que definan su posición.

Basteiro y González anunciaron que irán a la justicia electoral para recurrir la decisión, que afianza la conducción de Giustiniani y el perfil de un socialismo alejado del Gobierno en este crucial año electoral.

Publicado por el diario La Nación, pág. 8, el 27 de febrero de 2009